Fiesp prepara estudios técnicos para respaldar solicitudes de salvaguarda
Valor Econômico, 30/03/2005
La Federación de Industrias del Estado de São Paulo (Fiesp) tiene la intención de solicitar al gobierno que pronto instituya salvaguardias contra las importaciones de algunos productos chinos. "Las importaciones están creciendo agresivamente y a precios muy bajos", dice Paulo Skaf, presidente de Fiesp. La entidad está monitoreando el flujo de compras externas en algunos sectores y preparando el trabajo técnico necesario para la apertura de procesos de salvaguarda. A partir de la semana que viene, Fiesp contará con un comité de defensa comercial permanente.
Roberto Gianetti da Fonseca, director de comercio exterior de la entidad, cree que hay un “repunte de las importaciones” en algunos sectores. Afirma que los segmentos más afectados son indumentaria, calzado, óptica y electrónica.
Fiesp sostiene que las salvaguardias, que pueden ser aranceles o contingentes, se aplican solo contra China. “No estamos interesados en una salvaguardia general, porque eso afectaría a otros países”, explica Skaf. Para imponer salvaguardias solo contra los productos chinos, el sector privado necesita una regulación específica del gobierno federal.
Al ingresar a la Organización Mundial del Comercio (OMC), China aceptó que otros países miembros apliquen salvaguardas específicas contra sus productos. Sin embargo, es necesario que los mecanismos estén regulados de acuerdo con la legislación interna de cada país.
Hasta el momento, Brasil no ha logrado regular las salvaguardas contra China y el tema es controvertido dentro del gobierno. Los funcionarios del Ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior aún no han comentado oficialmente sobre el asunto, pero las fuentes del sector privado dicen que el Mdic apoya la regulación de salvaguardas y discutirá el asunto con la Cámara de Comercio Exterior (Camex). Itamaraty, por otro lado, teme que la institución de salvaguardas dañe la relación bilateral con China, considerada un socio estratégico.
Skaf tampoco descarta utilizar el mecanismo de defensa comercial chino conocido como dumping contra los productos chinos, a la espera del reconocimiento de China como economía de mercado. "Y esperamos que nunca se haga oficial, porque China no es una economía de mercado", dice.
El dumping ocurre cuando un país exporta a un precio inferior al practicado en su mercado interno. El estado de la economía de mercado, prometido por el presidente Luiz Inácio Lula da Silva durante la visita del presidente chino Hu Jintao al país, dificulta la apertura de los procedimientos de dumping. Al reconocer a China como una economía de mercado, Brasil está obligado a considerar el precio practicado por el país en su mercado interno. Los brasileños afirman que los precios internos en China están distorsionados por el apoyo estatal y utilizan un promedio internacional. (RL)