Por Eliane Oliveira (O Globo, 27/08/2004)

BRASILIA El ministro de Relaciones Exteriores, Celso Amorim, dijo ayer que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva le dio al equipo económico 30 días para encontrar una fórmula para ayudar financieramente a Paraguay a combatir la piratería y el comercio de productos falsificados. Según Amorim, quien estuvo acompañado por la canciller paraguaya Leila Rachid, entre las alternativas estaría la concesión de un préstamo y la creación de un fondo compensatorio.

Amorim explicó que cuestiones como los intereses y los plazos de los préstamos serán discutidos entre los ministros de finanzas de ambos países.

El anuncio se hizo después de un almuerzo, en Itamaraty, ofrecido por Lula al presidente de Paraguay, Nicanor Duarte. El ministro aclaró que, independientemente de este apoyo financiero, continuará el intenso trabajo de vigilancia e inspección en la frontera. Pero una de las preocupaciones de las autoridades brasileñas es el aumento del desempleo en el país vecino, causado por el asedio del contrabando.

? Lo que queremos es permitir que las industrias paraguayas se vuelvan más saludables y más equilibradas, reconociendo las asimetrías. Pero debo decir que la piratería no es algo que solo existe en Paraguay. ? dijo Amorim.

Según el ministro de Paraguay, en un año de administración, el gobierno actual ha triplicado la cantidad de incautaciones de productos falsificados.

Lula también le dio al gobierno un plazo de 30 días para encontrar formas de financiar obras de infraestructura y comercio entre Brasil y Paraguay. En este caso, deben ingresar fondos del BNDES y del Programa de Financiamiento de Exportaciones (Proex).