Un ejemplo a seguir en la lucha contra el alcohol ilegal.

por ETCO
30/01/2019

ETCO ha estado discutiendo medidas para combatir el alcohol ilegal por algún tiempo. La complejidad del tema, que incluye productos adulterados, de contrabando e incluso caseros, requiere la acción conjunta de varias agencias gubernamentales para tratar de eliminar el problema.

Sin embargo, iniciativas simples pueden servir como modelo para que Brasil combata las bebidas alcohólicas adulteradas. Este es el caso del carnaval callejero en la capital de Río de Janeiro.

La ciudad de Río de Janeiro promueve periódicamente la competencia por la venta de bebidas alcohólicas durante los días festivos. La empresa ganadora es responsable no solo de proporcionar bebidas oficiales a los vendedores ambulantes, sino también de capacitarlos para que cumplan con las regulaciones actuales. Como resultado, existen beneficios directos, como el control de la venta de bebidas a menores y una mayor higiene en el manejo de los productos, y también indirectos, principalmente, debido a la estandarización del precio de venta del alcohol, que es fijo. Por lo tanto, existe un desincentivo general a la comercialización de alcohol ilegal.

La simple prohibición de la venta de bebidas, como ocurre en eventos similares en otras ciudades del país, no impide su consumo. Lo que sucede es que, sin una fuente regular de suministro, muchas personas terminan migrando al consumo de bebidas ilegales, lo que estimula una extensa cadena criminal. El modelo de comercialización adoptado, en este caso, es una medida efectiva que evita innumerables consecuencias para la salud pública de los consumidores, la evasión fiscal y los prejuicios a la libre competencia.