Después de cinco años en declive, el Índice de Economía Subterránea, publicado por el ETCO en conjunto con el Instituto Brasileño de Economía de la Fundación Getúlio Vargas (IBRE / FGV), deja de caer y permanece en alrededor del 17%. Según los investigadores, esta es una señal de que el proceso de formalización ha alcanzado su límite institucional.
La estimación del 16,9% en relación con el PIB para 2012 representa una diferencia considerada residual en comparación con el 17% en 2011 y confirma la tendencia, ya señalada por investigadores del IBRE / FGV en junio, de que una de las principales partes responsables alcanzó su límite por las sucesivas caídas de IES: el crecimiento del empleo formal.
Con la excepción de 2009, un año atípico para la economía debido a la crisis global, desde 2007 las IES brasileñas habían disminuido 0,7 puntos porcentuales por año, pasando de 20,2% en 2006 a 17% en 2011. “En gran parte , esta caída se explica por el aumento significativo del mercado laboral formal observado en los últimos años y que es consecuencia del buen desempeño de la economía brasileña en el período, incluso durante la crisis de 2009 ”, analiza el investigador del IBRE / FGV, responsable de preparar del IES, Fernando de Holanda Barbosa Filho.
Holanda cree, sin embargo, que este crecimiento en el mercado laboral formal ha alcanzado su límite y señala dos factores principales como un obstáculo para la continuación de esta evolución. Una de ellas, bien conocida, es la rigidez de las leyes laborales, que, según él, "vinculan la economía". El otro, menos obvio, pero con mucho impacto en la reducción de la informalidad, es el nivel de educación de los brasileños. “Según Pnad, entre 2002 y 2011, la informalidad en el mercado laboral cayó 10 puntos porcentuales, del 43% al 32% de la población ocupada total. El aumento en los 22 millones de personas que fueron educadas entre 2001 y 2011 representa el 64% de esta caída ”, enfatiza el investigador. Pero el nivel aún bajo de calificación actúa como un factor limitante en la relación de informalidad.
Para Roberto Abdenur, director ejecutivo de ETCO, "estos números brindan nuevas y ricas posibilidades con respecto a la mejora del mercado laboral en el país y la consiguiente reducción de la informalidad" en la economía. "Si, por un lado, suavizar las rígidas leyes laborales es una misión cada vez más esencial, invertir en educación es mucho más que un objetivo, es una obligación para una nación que afirma ser fuerte y posicionarse entre las principales economías del mundo" , destaca Abdenur.