LOS NÚMEROS DE ALARANTES DE LA INFORMALIDAD

por ETCO

Fuente: TotalMovéis - São Bento do Sul / SC - 30/07/2010

Boletín del consumidor RS -CGI Furniture

Un estudio realizado por la Fundação Getúlio Vargas, en alianza con Etco (Instituto Brasileño de Ética en la Competencia), reveló que las actividades informales e ilegales totalizaron R $ 578 mil millones en 2009.

El valor representa el 18,4% del PIB del país (Producto Interno Bruto). Los segmentos analizados comprenden actividades que van desde el trabajo de los vendedores ambulantes, que sobreviven en gran parte gracias a la venta de productos pirateados, hasta el narcotráfico.


Lo que hay que tener en cuenta a la hora de descifrar estos números es que la informalidad que aparece en el estudio acaba por perjudicar a las empresas legales, ya que tienen que pagar más impuestos para compensar los impuestos evadidos por otros.


Pero, ¿qué hace que una persona o empresa prefiera permanecer al margen de la ley en lugar de buscar regularizar su situación? La respuesta puede estar en los altos costos y la enorme burocracia involucrada en la creación y mantenimiento formal de una empresa. Por ello, la opción por la informalidad parece ventajosa o incluso la única alternativa de supervivencia tanto para el trabajador como para la pequeña empresa. Sin embargo, lo que muchas veces no se analiza es que, si sufre las consecuencias de la inspección o la acción laboral, por ejemplo, el gran riesgo del emprendedor que vive en la informalidad es no poder prosperar y aumentar su capital.


Otra idea errónea, que ayuda a fomentar la opción de no regularizar las actividades de la empresa, es creer que habrá una reducción del margen de beneficio. Si el emprendedor cree que obtendrá un porcentaje muy por debajo de lo esperado si tiene que cobrar todos los impuestos, ciertamente no optará por la formalidad. Sin embargo, si lo miras desde otra perspectiva, te darás cuenta de que son muchas las ventajas que ofrece la formalización, como una mayor capacidad de negociación con proveedores, acceso a capital de trabajo y mayor volumen de negocio.


En otras palabras, incluso si todavía estamos en un país que dificulta la vida de quienes quieren establecer y mantener su negocio, la iniciativa de formalización siempre es bienvenida y debe ser impulsada por todos los sectores de la sociedad. Porque, solo así, ya no tendremos que lamentar cifras como las que publica la Fundación Getúlio Vargas.

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Las cifras alarmantes de informalidad

por ETCO

Fuente: ParanaShop - 26/07/2010

Un estudio realizado por la Fundación Getúlio Vargas (FGV), en asociación con Etco (Instituto Brasileño de Ética en Competencia), reveló que las actividades informales e ilegales, llamadas economía subterránea, totalizaron R $ 578 mil millones en 2009.

El valor representa el 18,4% del PIB del país (Producto Interno Bruto). Los segmentos analizados comprenden actividades que van desde el trabajo de los vendedores ambulantes, que sobreviven en gran parte gracias a la venta de productos pirateados, hasta el narcotráfico.

Lo que hay que tener en cuenta a la hora de descifrar estos números es que la informalidad que aparece en el estudio acaba por perjudicar a las empresas legales, ya que tienen que pagar más impuestos para compensar los impuestos evadidos por otros.

Pero, ¿qué hace que una persona o empresa prefiera permanecer al margen de la ley en lugar de buscar regularizar su situación? La respuesta puede estar en los altos costos y la enorme burocracia involucrada en la creación y mantenimiento formal de una empresa. Por ello, la opción por la informalidad parece ventajosa o incluso la única alternativa de supervivencia tanto para el trabajador como para la pequeña empresa. Sin embargo, lo que muchas veces no se analiza es que si sufre las consecuencias de la inspección o la acción laboral, por ejemplo, el gran riesgo del emprendedor que vive en el sector informal es no poder prosperar y aumentar su capital.

Otra idea errónea que ayuda a incentivar la opción de no regularizar las actividades de la empresa es creer que habrá una reducción del margen de beneficio. Si el empresario piensa que obtendrá un porcentaje muy por debajo de lo esperado si tiene que cobrar todos los impuestos, ciertamente no optará por la formalidad. Sin embargo, si lo miras desde otro punto de vista, te darás cuenta de que son muchas las ventajas que ofrece la formalización, como una mayor capacidad de negociación con proveedores, acceso a capital de trabajo y un mayor volumen de negocio.

En otras palabras, incluso si todavía estamos en un país que dificulta la vida de quienes quieren establecer y mantener su negocio, la iniciativa de formalización siempre es bienvenida y debe ser impulsada por todos los sectores de la sociedad. Porque, solo así, ya no tendremos que lamentar cifras como las que da a conocer FGV.
 

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